Por qué Estados Unidos necesita aliados en una guerra comercial contra China
Resumen ejecutivo
El 1 de diciembre, en Buenos Aires, el presidente Trump comenzó el reloj de 90 días para negociar un acuerdo comercial con China. Afirma que quiere abordar las grandes preocupaciones sistémicas relacionadas con el robo de la propiedad intelectual estadounidense, la transferencia forzada de tecnología de las empresas estadounidenses y la naturaleza impulsada por el Estado de la economía china. Para los observadores del comercio, el plazo para tales ambiciones suena absurdo. Pero no están totalmente fuera de su alcance. Si Trump compensa con amigos despreciados para enfrentarse a un adversario común, podría obtener un trato significativo. En lo que sería el giro político más impresionante de la presidencia de Trump hasta ahora, es posible que los negociadores estadounidenses puedan unir fuerzas con sus homólogos previamente rechazados en Europa y Japón para formar un frente colectivo, todos presionando por la reforma china.